dissabte, d’octubre 15, 2005
ALTA TENSIÓN EN MARCILLA -NAVARRA-
          La instalación de una línea de alta tensión crea preocupación en Marcilla  
La asociación naturalista Alnus ve intereses políticos en el trazado elegido
Las distintas alegaciones presentadas por Ayuntamiento, 300 particulares y asociaciones han sido rechazadas
NENIQUES ROLDÁN
MARCILLA.Navarra. Los vecinos de Marcilla se encuentran seriamente preocupados por la inminente instalación de la línea de alta tensión por la que discurrirá la energía generada en los distintos parques eólicos de la Ribera Alta y de la Zona Media, así como las centrales de ciclo combinado de Castejón. Entre los seis trazados posibles, el elegido, con el visto bueno del Gobierno de Navarra, por Red Eléctrica Española es el que más perjudica a Marcilla en beneficio del resto de localidades, obligando además a abandonar la línea recta y realizando una curva que acerca la línea a 300 metros del casco urbano.
Pese a que desde el Ayuntamiento se piensa llegar "hasta donde se pueda" para intentar paralizar la instalación de dichas líneas, lo cierto es que la primera torre del trazado estaría a punto de ponerse. Dichas torres, por las que pasarían líneas de tensión de 400.000 voltios, (400 Kv), tendrán una envergadura de 67 metros de altura, con doble circuito, y una base de 11,80 metros por 11,80, es decir 140 metros cuadrados.
Pero el impacto visual es lo que menos preocupa a los vecinos de Marcilla, y especialmente a los miembros de Alnus, asociación naturalista de la localidad, ya que los posibles riesgos para la salud de los vecinos, así como el impacto que provocará en espacios naturales de alto valor medioambiental, paisajístico y recreativo, son las preocupaciones más acuciantes para ellos.
Desde que hace cuatro años se presentará el primer proyecto Alnus ya se mostró contraria al mismo. "Nos oponemos al trazado, no al proyecto, porque al parecer es para el interés general de Navarra pudiendo contribuir a su desarrollo integral", apuntan en la asociación naturalista. Esto les ha llevado a presentar cientos de alegaciones, que se han unido a las presentadas por otros trescientos vecinos de la localidad así como por propio Consistorio. Sin embargo, ninguna de ellas ha sido tenida en cuenta.
Al parecer, y según apuntan desde la propia asociación naturalista, de los seis posibles trazados que fueron propuestos por la empresa, el elegido finalmente y al que se ha dado visto bueno desde el Gobierno de Navarra habría sido el peor calificado por todos los técnicos participantes en el proyecto: técnicos del Gobierno de Navarra, responsables de consejerías de Medio Ambiente, Obras Públicas, Industria, Servicio de Guardería, biólogos de diferentes áreas del Gobierno, así como recomendaciones y mandatos recogidos y publicados en el BON y el BOE; todos ellos, aseguran en el colectivo, habrían reconocido las graves afecciones que el trazado producirá en Marcilla, y habría sido calificado como una auténtica aberración.
Precauciones Para seleccionar el mejor trazado posible existen unas condiciones generales reguladas que deberían pasar por: estar lo más alejado posible de núcleos urbanos, no afectar a suelo urbano industrial, eludir espacios protegidos, evitar zonas de terreno inestables, afectar lo menos posible a zonas de regadío y evitar zonas de interés ecológico.
Pero ninguna de estas premisas se salvan en el trazado finalmente seleccionado, ya que pasa a menos de 300 metros del barrio de la Azucarera de Marcilla; atraviesa la zona industrial de Refrescos Sur de Europa así como al futuro polígono industrial previsto en dicha zona; tampoco evitaría las zonas de terreno inestables, ya que pasa por cortados del Aragón que presentan altos riesgos de desprendimientos; así mismo una amplia zona de regadío de Cadreita, Villafranca, Marcilla y Peralta, se vería afectada.
Razones gubernamentales Lejos de estas consideraciones, la promotora, con el beneplácito del Gobierno, alega que no afecta al parque natural de Bardenas, ni al LIC Tramos del Bajo Aragón como las principales razones para elegir un trazado que no es lógicamente rectilíneo y paralelo a la actual línea de 220.000 voltios, sino que hace una curva, como se muestra en el gráfico, para adentrarse en el término municipal de Marcilla.
A este respecto, desde la asociación naturalista se entiende que ambas razones no sería válidas ya que si bien la afección en las Bardenas no llegaría ni a una hectárea, esta ya estaría atravesada por la línea de 220.000 voltios, y bordearía la zona de Bardenas excluida del parque natural con la intención de ubicar un vertedero de residuos industriales. Así mismo, y en lo que respecta al LIC Tramos Bajos del Aragón, esta misma se vería mucho más afectada con el trazado elegido que con cualquiera de los otros cinco.
Razones políticas Uno de los trazados propuestos como alternativa por el Consistorio, así como por Alnus, preveía seguir la línea de alta tensión, que se situaría a tres kilómetros del casco urbano de Marcilla y a otros tres de Caparroso.
Finalmente, y ante la falta de razones lógicas para haber optado por el trazado final, desde la propia asociación naturalista se apunta a razones políticas las que habría hecho que se trajera la línea a Marcilla. La primera de ellas vendría desde el propio municipio de Caparroso "cuyo alcalde es el presidente de la Federación Navarra de Municipios y Concejos", señalan, y la otra vendría del ex director general de Medio Ambiente, José Torres Ruiz, por cuyas fincas atravesaba la línea, y una vez modificada "minimizaría la afección a la finca Soto-Torres. Modificaciones que se han hecho con el estudio de impacto medioambiental ya aprobado", asegura Alnus.
          
		
 
  
La asociación naturalista Alnus ve intereses políticos en el trazado elegido
Las distintas alegaciones presentadas por Ayuntamiento, 300 particulares y asociaciones han sido rechazadas
NENIQUES ROLDÁN
MARCILLA.Navarra. Los vecinos de Marcilla se encuentran seriamente preocupados por la inminente instalación de la línea de alta tensión por la que discurrirá la energía generada en los distintos parques eólicos de la Ribera Alta y de la Zona Media, así como las centrales de ciclo combinado de Castejón. Entre los seis trazados posibles, el elegido, con el visto bueno del Gobierno de Navarra, por Red Eléctrica Española es el que más perjudica a Marcilla en beneficio del resto de localidades, obligando además a abandonar la línea recta y realizando una curva que acerca la línea a 300 metros del casco urbano.
Pese a que desde el Ayuntamiento se piensa llegar "hasta donde se pueda" para intentar paralizar la instalación de dichas líneas, lo cierto es que la primera torre del trazado estaría a punto de ponerse. Dichas torres, por las que pasarían líneas de tensión de 400.000 voltios, (400 Kv), tendrán una envergadura de 67 metros de altura, con doble circuito, y una base de 11,80 metros por 11,80, es decir 140 metros cuadrados.
Pero el impacto visual es lo que menos preocupa a los vecinos de Marcilla, y especialmente a los miembros de Alnus, asociación naturalista de la localidad, ya que los posibles riesgos para la salud de los vecinos, así como el impacto que provocará en espacios naturales de alto valor medioambiental, paisajístico y recreativo, son las preocupaciones más acuciantes para ellos.
Desde que hace cuatro años se presentará el primer proyecto Alnus ya se mostró contraria al mismo. "Nos oponemos al trazado, no al proyecto, porque al parecer es para el interés general de Navarra pudiendo contribuir a su desarrollo integral", apuntan en la asociación naturalista. Esto les ha llevado a presentar cientos de alegaciones, que se han unido a las presentadas por otros trescientos vecinos de la localidad así como por propio Consistorio. Sin embargo, ninguna de ellas ha sido tenida en cuenta.
Al parecer, y según apuntan desde la propia asociación naturalista, de los seis posibles trazados que fueron propuestos por la empresa, el elegido finalmente y al que se ha dado visto bueno desde el Gobierno de Navarra habría sido el peor calificado por todos los técnicos participantes en el proyecto: técnicos del Gobierno de Navarra, responsables de consejerías de Medio Ambiente, Obras Públicas, Industria, Servicio de Guardería, biólogos de diferentes áreas del Gobierno, así como recomendaciones y mandatos recogidos y publicados en el BON y el BOE; todos ellos, aseguran en el colectivo, habrían reconocido las graves afecciones que el trazado producirá en Marcilla, y habría sido calificado como una auténtica aberración.
Precauciones Para seleccionar el mejor trazado posible existen unas condiciones generales reguladas que deberían pasar por: estar lo más alejado posible de núcleos urbanos, no afectar a suelo urbano industrial, eludir espacios protegidos, evitar zonas de terreno inestables, afectar lo menos posible a zonas de regadío y evitar zonas de interés ecológico.
Pero ninguna de estas premisas se salvan en el trazado finalmente seleccionado, ya que pasa a menos de 300 metros del barrio de la Azucarera de Marcilla; atraviesa la zona industrial de Refrescos Sur de Europa así como al futuro polígono industrial previsto en dicha zona; tampoco evitaría las zonas de terreno inestables, ya que pasa por cortados del Aragón que presentan altos riesgos de desprendimientos; así mismo una amplia zona de regadío de Cadreita, Villafranca, Marcilla y Peralta, se vería afectada.
Razones gubernamentales Lejos de estas consideraciones, la promotora, con el beneplácito del Gobierno, alega que no afecta al parque natural de Bardenas, ni al LIC Tramos del Bajo Aragón como las principales razones para elegir un trazado que no es lógicamente rectilíneo y paralelo a la actual línea de 220.000 voltios, sino que hace una curva, como se muestra en el gráfico, para adentrarse en el término municipal de Marcilla.
A este respecto, desde la asociación naturalista se entiende que ambas razones no sería válidas ya que si bien la afección en las Bardenas no llegaría ni a una hectárea, esta ya estaría atravesada por la línea de 220.000 voltios, y bordearía la zona de Bardenas excluida del parque natural con la intención de ubicar un vertedero de residuos industriales. Así mismo, y en lo que respecta al LIC Tramos Bajos del Aragón, esta misma se vería mucho más afectada con el trazado elegido que con cualquiera de los otros cinco.
Razones políticas Uno de los trazados propuestos como alternativa por el Consistorio, así como por Alnus, preveía seguir la línea de alta tensión, que se situaría a tres kilómetros del casco urbano de Marcilla y a otros tres de Caparroso.
Finalmente, y ante la falta de razones lógicas para haber optado por el trazado final, desde la propia asociación naturalista se apunta a razones políticas las que habría hecho que se trajera la línea a Marcilla. La primera de ellas vendría desde el propio municipio de Caparroso "cuyo alcalde es el presidente de la Federación Navarra de Municipios y Concejos", señalan, y la otra vendría del ex director general de Medio Ambiente, José Torres Ruiz, por cuyas fincas atravesaba la línea, y una vez modificada "minimizaría la afección a la finca Soto-Torres. Modificaciones que se han hecho con el estudio de impacto medioambiental ya aprobado", asegura Alnus.























