dijous, de setembre 15, 2005
Hay que condenar todas las agresiones. El Alcalde no fué el único agredido.
La agresión de un vecino de Torreblanca al alcalde de Les Coves, Miguel Zaragozá, tras aprobar un vertedero de residuos peligrosos en este último municipio desató el martes una tormenta política entre los principales partidos políticos de la Comunidad.
El PP acusó al PSPV y al Bloc de "orquestar" la agresión, mientras que estos dos partidos negaron cualquier implicación en este acto de violencia. En lo único que coincidieron los tres grupos fue en alzar una voz de condena sin paliativos hacia los incidentes ocurridos el lunes por la noche.
El vicepresidente del Consell, Víctor Campos, fue el más tajante en sus valoraciones, e incluso señaló a los cargos políticos a los que responsabiliza de la agresión.
El dirigente popular aseguró que en el reducido grupo de personas que agredió al alcalde de Les Coves, "según se ha visto en los medios de comunicación y nos han contado, estaban la alcaldesa de Alcalà de Xivert, el de Torreblanca, el alcalde de Benlloch, el portavoz del PSPV de Vilanova, y representantes del Bloc y del partido socialista de la comarca en actitud violenta contra un alcalde democrático".
Tema orquestado
Horas más tarde, el presidente de la Diputación de Castellón y del PP en la provincia de la Plana, Carlos Fabra, reiteraba la acusación de que la agresión "era un tema orquestado por el PSPV y el Bloc".
Fabra aseguró tener una "lista interminable" de cargos del PSPV y del Bloc "que asistieron a Les Coves, como la alcaldesa de Alcalà, el de Torreblanca o el portavoz del Bloc en la Diputación". Sin embargo, el presidente de la Corporación provincial de Castellón rectificó respecto a la presencia del alcalde de Benlloch y reconoció que no tenían "constancia de que estuviese".
Tanto PSPV como Bloc reconocieron la participación de dirigentes y simpatizantes de sus respectivos partidos en la concentración "pacífica" a las puertas del Ayuntamiento de Les Coves.
No obstante, negaron cualquier participación y aseguraron que se trató de un hecho aislado. El Ayuntamiento de Torreblanca, presidido por el nacionalista Josep Vicent Rubert, fletó un autobús para facilitar el traslado de vecinos hasta la vecina localidad de Les Coves para protestar contra el proyecto. Aseguran les perjudica más que al municipio en el que se emplazará.
El PP acusó al PSPV y al Bloc de "orquestar" la agresión, mientras que estos dos partidos negaron cualquier implicación en este acto de violencia. En lo único que coincidieron los tres grupos fue en alzar una voz de condena sin paliativos hacia los incidentes ocurridos el lunes por la noche.
El vicepresidente del Consell, Víctor Campos, fue el más tajante en sus valoraciones, e incluso señaló a los cargos políticos a los que responsabiliza de la agresión.
El dirigente popular aseguró que en el reducido grupo de personas que agredió al alcalde de Les Coves, "según se ha visto en los medios de comunicación y nos han contado, estaban la alcaldesa de Alcalà de Xivert, el de Torreblanca, el alcalde de Benlloch, el portavoz del PSPV de Vilanova, y representantes del Bloc y del partido socialista de la comarca en actitud violenta contra un alcalde democrático".
Tema orquestado
Horas más tarde, el presidente de la Diputación de Castellón y del PP en la provincia de la Plana, Carlos Fabra, reiteraba la acusación de que la agresión "era un tema orquestado por el PSPV y el Bloc".
Fabra aseguró tener una "lista interminable" de cargos del PSPV y del Bloc "que asistieron a Les Coves, como la alcaldesa de Alcalà, el de Torreblanca o el portavoz del Bloc en la Diputación". Sin embargo, el presidente de la Corporación provincial de Castellón rectificó respecto a la presencia del alcalde de Benlloch y reconoció que no tenían "constancia de que estuviese".
Tanto PSPV como Bloc reconocieron la participación de dirigentes y simpatizantes de sus respectivos partidos en la concentración "pacífica" a las puertas del Ayuntamiento de Les Coves.
No obstante, negaron cualquier participación y aseguraron que se trató de un hecho aislado. El Ayuntamiento de Torreblanca, presidido por el nacionalista Josep Vicent Rubert, fletó un autobús para facilitar el traslado de vecinos hasta la vecina localidad de Les Coves para protestar contra el proyecto. Aseguran les perjudica más que al municipio en el que se emplazará.